La niñez no es para pensar en matrimonio, se abre la puerta a la explotación infantil
Muchas veces como presbítero de la Iglesia Católica presencié matrimonios, fui testigo de cómo muchas parejas se comprometían a amarse durante toda la vida y celebraban el sacramento del matrimonio. También fui testigo, conciliador, mediador en muchos...
Muchas veces como presbítero de la Iglesia Católica presencié matrimonios, fui testigo de cómo muchas parejas se comprometían a amarse durante toda la vida y celebraban el sacramento del matrimonio. También fui testigo, conciliador, mediador en muchos conflictos de pareja; algunas veces podían construir soluciones estando juntos y otras veces tenían que separarse inteligentemente. Esas experiencias me hicieron entender que esa decisión exige un alto grado de madurez, porque la construcción de un proyecto común en la convivencia diaria, nunca es fácil, a pesar de que en el enamoramiento se crea que sí. See omnystudio.com/listener for privacy information.