De vender pescado a las pasarelas de la moda, una historia inspiradora: opinión de Alberto Linero
Ella con su ropa sucia y vieja, con su pelo recogido y sus chancletas desgastadas por el uso, gritaba con voz potente: “Bochachico, Lebranche, Pescao” mientras empujaba una carretilla en medio del calor de las calles de Valledupar, así trabajaba para...
Ella con su ropa sucia y vieja, con su pelo recogido y sus chancletas desgastadas por el uso, gritaba con voz potente: “Bochachico, Lebranche, Pescao” mientras empujaba una carretilla en medio del calor de las calles de Valledupar, así trabajaba para obtener los recursos que le permitían sobrevivir. Se trata de Carmen Verbel Ballesta, una joven de 1.73 de altura, de contextura delgada y facciones delicadas que vio realizado sus sueños de ser modelo. Sí, de ser una vendedora ambulante de pescado, pasó a desfilar las creaciones del diseñador Darío Valencia. Ella sonríe y sigue trabajando duro para ser una gran modelo y poder estar en las mejores pasarelas del mundo. See omnystudio.com/listener for privacy information.